Risotto azafranado con cordero braseado

Un plato que incorpora productos bien diferentes desde su concepción y que –combinados– se vuelven un placer para nuestros sentidos.

El risotto es un clásico de nuestra cocina al que agregamos azafrán. Este sutil condimento culinario cumple una función colorante y aromática. El cordero braseado es un proceso largo, de unas seis horas, en el cual se coloca el pernil de cordero a cocción lenta con verduras y finamente es sazonado y aromatizado con hierbas. Luego de este tiempo, nuestro Chef obtiene un producto suave, sabroso y sumamente expresivo, el cual se agrega al risotto. Luego se agregar queso Parmigiano Reggiano para obtener un absoluto mantecato que le brindará el toque cremoso a la elaboración.

Un plato tan gourmet necesita un vino que llene de elegancia la ocasión, por eso elegimos un D.V Catena Pinot Noir – Pinot Noir.

MARIDAJE:

D.V Catena Pinot Noir – Pinot Noir

Un Pinot Noir único y singular que proviene de dos viñedos diferentes de Tupúngato: uno de “Domingo” Villa Bastías (a 1.120 metros sobre el nivel del mar) y el otro de “Adrianna” Gaulatallary, a 1.480 metros de altitud. El vino pasa doce meses en barricas de 85% roble francés y 15% roble americano. Al ser dos viñedos diferentes, se obtiene Pinot Noir diferentes, en colores, en expresiones aromáticas y en volúmenes de boca.

Esa es la filosofía: unir estas condiciones para obtener un vino elegante con una paleta aromática muy extensa que va desde las frutas rojas (como la cereza) y las ciruelas frescas, pasando por sutiles notas de vainilla, café, y sotobosque. En boca se presenta franco, con una entrada dulce y armoniosa de la mano de taninos maduros.

Un maridaje de esplendor, no van a faltar colores, no van a faltar aromas ni sabores y por sobre todo no van a faltar brindis. ¡Salud!

Tarta de manzanas con crumble de canela y helado de crema

Una quebradiza masa sablèe, unas jugosas y crujientes manzanas verdes junto a un cautivante crumble de canela harán de nuestro final de cena un recuerdo intacto de ella. Nos gustan las experiencias, por lo que bien podríamos casarlo con un vino botritizado o con un tardío. Pero en el mundo del maridaje –más allá de tener ciertas normas– hay que degustar el vino y probar el plato, hasta que ensayos y errores lleven a lograr la vivencia y deslumbrar los sentidos.
Por eso optamos por un Espumoso Garzón Brut Rosè.

MARIDAJE:

Espumoso Garzón Brut Rosè

Elaborado 100% Pinot Noir, es un espumoso de delicado color salmón, burbujas pequeñas, rápidas y continuas, que asocia elegantes notas maduras de frutillas, cerezas y aromas de crianza.

En boca se presenta fresco, acompañando un largo y placentero final. Se caracteriza por su deliciosa acidez y su persistencia profunda. Una bella experiencia de frutas combinadas y cargada de crujientes burbujas.